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El florìn

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El florín fue una de las primeras monedas de oro a ser acuñada después de la caída del imperio Romano en Italia. Del peso de 3,54 gramos fue forjado en oro de 24 quilates por la primera vez en el año 1252 en Florencia. El nombre deriva del nombre en latín de la azucena, símbolo heráldico de Florencia, representado al derecho de la moneda. En el reverso estaba San Juan, patrón de la ciudad, de pie.
En el siglo XIII y hasta el renacimiento el florín, gracias a la creciente potencia bancaria de Florencia, se convirtió en la moneda de cambio preferida en Europa y junto al ducado de Venecia también los más imitados. En efecto los tipos de la famosa moneda florentina fueron forjados por varios países con los cuales Florencia tenía relaciones comerciales tales como España, Francia, Holanda, Luxemburgo, Bohemia, Hungría, Polonia que, sólo modificando la leyenda, inicialmente presentaron una gran adherencia a los originales para luego pasar a opciones iconográficas que mejor identificaron el país imitante. Y no sólo. Por el notable prestigio alcanzado, el florín de Florencia también fue imitado en algunas ciudades italianas incluyendo Roma, Nápoles y algunos centros del Norte de Italia. "En el 1252, después de la derrota de Sanes en Montalcino, los florentinos forjaron una moneda de oro,  que como ganaba valor sobre las demàs, en breve ganó  fama. Fue este el Florín De oro, de la suprema pureza de 24 quilates y el peso de un dracma, la cual fue imitada o falsificada en casi todas las casas de la moneda de Europa, y con poca variación de aleación y peso que incluso dura bajo el nombre de sequín.
Los primeros a forjar florines imitados de aquellos de Florencia fueron quizás san Ludovico, si a él y no a Luis X. Continuaron tal ejemplo las repúblicas de Venecia y Génova, cuyo florín se llamó ducado ; Alberto I, duque de Austria, luego emperador;  el rey de Bohemia;  Juan XXII, sumo pontífice;  los reyes de Hungría, de Aragón; Juana, reina de Nápoles;  Amadeo VI, conde de Saboya;  el delfín vienés;  el marqués de Monferrato;  el obispo de Trecastelli y muchos otros príncipes y prelados.
Pero parece que los primeros florines forjados a similitud de los florentinos no fueran menores a aquellos ni de pureza ni de peso, ya que en las cuentas de los tesoreros no se ha encontrado diferencia entre ellos. Más bien una especie de florines llamada pequeños florines, porque quizás menores en el diámetro a aquellos de Florencia, aunque superiores de peso, fueron  en los primeros años del siglo XIV de mayor valor.
El florín de Génova, llamado ducado de oro o genovino, fue al principio de menor valor que el florín de Florencia, pero luego lo igualò y algunas veces lo pasó. Mayores del florín de Florencia, aunque imitaciones de èste, fueron también el ducado véneto forjado en el 1284 y el ducado del papa o de sala", (Luigi Cibrario,De la economía política de la edad media, vol. II, Torino, Botta, 1861)

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